Cuando el explorador polar británico Robert Scott dirigió su famosa segunda expedición a la Antártida en 1910 (falleció allí en 1912), el equipo se llevó consigo un suministro de pastel de frutas inglés. El New York Times informó que el pastel de frutas se encontró dentro de un antiguo edificio de madera en la Antártida utilizado por la expedición en 1911, el pastel todavía envuelto en papel en su lata original "parece y huele comestible". Con más de cien años, ¿es este el pastel de frutas más antiguo del mundo?
